Nuestra piel es un verdadero milagro: nos protege de lesiones, gérmenes y rayos UV, regula nuestra temperatura corporal y nos permite sentir el dolor y el tacto. Con el cuidado adecuado, podemos ayudar a que nuestra funda protectora se mantenga saludable y hermosa.
Cada persona es diferente y esto también se aplica a cada tipo de piel
No podemos decidir que tipo de piel tener, sensible, seca o grasa. Nacemos con tipo de piel y esta va cambiando con el transcurso de los años. Aunque no se puede decidir nada sobre nuestros genes, aún podemos hacer mucho por nuestra piel y entregarle lo que necesita para mantenerse saludable.
Piel normal
La piel normal es equilibrada, ni demasiado seca ni demasiado grasa y no tiende a las impurezas. Las personas con este tipo de piel generalmente no sienten la necesidad de aplicar crema o cuidar su piel de ninguna otra manera. Sin embargo igual se sugiere cuidarla para que se mantenga siempre de esa manera.
Piel sensible
Este tipo de piel tiende a enrojecerse e irritarse, especialmente alrededor de las mejillas, el puente de la nariz y la barbilla. Después de tomar el sol, la piel se tensa y se quema rápidamente, y a menudo se forman pequeños vasos sanguíneos superficiales como arañitas.
Incluso las personas de piel muy clara que son sensibles al sol a menudo tienen la piel irritada con facilidad. Las personas sensibles al frío también pueden presentar lesiones en la piel.
Lo que necesitas: “¡Protector solar!
Los rayos UV son particularmente notorios en la piel sensible. Las cremas de día que ya tienen un factor de protección solar más alto son muy adecuadas. La piel sensible siempre debe tratarse con cuidado, puede reaccionar a muchas sustancias con irritación.
Por eso el lema es: menos es más
Cuanto más corta sea la lista de ingredientes en el empaque de un producto, mayores serán las posibilidades de que sea bien tolerado. Las cremas para pieles sensibles como Sensibio Forte suelen contener activos calmantes como pantenol, extracto de caléndula, pepino o aceite de almendras.
Una característica de calidad de los productos para el cuidado es definitivamente una lista detallada de todos los ingredientes. Recomiendo enfáticamente no comprar productos que no enumeren los ingredientes.
Qué más ayuda con el cuidado de la piel
Es mejor que las personas con piel sensible eviten los productos que contienen alcohol o sustancias potencialmente irritantes. Las fragancias también pueden causar problemas a la piel sensible. Si la crema no tiene olor o no huele bien, no significa automáticamente que sea mala.
Una vez que hayas encontrado un producto que no irrita tu piel, es mejor seguir con él y no seguir probando nuevas cremas con diferentes ingredientes a menos que la dermatóloga lo recomiende.
Piel seca
La piel tensa, con picazón, escamosa o áspera carece de humedad y grasa. La piel seca a veces no es solo un problema cosmético, sino también un problema médico, indican los dermatólogos de Lima Derma.
Se considera que es más susceptible a la inflamación o los gérmenes. Muchas enfermedades de la piel, como la dermatitis atópica y la psoriasis, pero también la diabetes y el hipotiroidismo, a menudo se asocian con la piel seca.
Lo que necesita la piel seca
La piel seca necesita productos que compensen la falta de humedad y grasa y puedes adquirirlos en FarmaLink. La película grasosa en la piel básicamente no es algo malo. Al contrario: protege la piel de los daños del medio ambiente y los gérmenes.
Esto es posible, por ejemplo, con ácidos grasos omega-3, urea, almendras, onagra o ceramidas. La molécula ayuda a retener el agua en la capa superior de la piel. Esto hace que la piel sea más flexible y resistente.
Qué más ayuda al tipo de piel seca
Si tiendes a tener la piel seca, lo mejor es aplicar la crema dos veces al día, explican los dermatólogos de Lima Derma. Muchas personas con piel seca tienen problemas en la piel, especialmente cuando cambia la estación.
En invierno, cuando el aire es bastante seco y frío, estos tipos de piel necesitan un cuidado aún más intensivo que en verano. Una crema especial para la noche que es incluso más rica que la de día, también puede ayudar aquí.
También se aplica lo siguiente en pieles secas
Beber mucha agua, no solo aplica con la piel seca. Los dermatólogos de Lima Derma explican que dos litros al día tiene sentido. La piel siempre se beneficia de esto porque puede almacenar mejor la humedad.
Las vacaciones junto al mar también son buenas: el alto contenido de sal en el aire tiene un efecto positivo en el contenido de humedad de la piel. También se aconseja no abusar de los peelings, los exfoliantes físicos en el rostro y los largos baños calientes: La higiene excesiva priva a la piel de la humedad.
Piel grasosa
Una cara brillante y grasosa muestra que la piel está produciendo más sebo del que necesita. Esto a menudo conduce a puntos negros y acné. Aunque el nombre suene así, la piel grasa no tiene nada que ver con una mala higiene.
Lo que necesita el tipo de piel grasa
Con este tipo de piel, la limpieza juega un papel importante en la vida cotidiana. Los dermatólogos de Lima Derma recomiendan una espuma de lavado sin jabón con pH neutro que retire el exceso de grasa en la piel.
También se recomienda usar una crema hidratante después de la limpieza, incluso si tienes la piel grasa. Cuando la piel se seca, vuelve a producir más sebo, lo que a su vez puede causar brotes.
Muchos productos contra las espinillas también resecan la piel. Es mejor que las personas con piel impura elijan humectantes que no sean comedogénicos: esto significa que no contienen ninguna sustancia que promueve el acné.
Qué más ayuda con la piel grasa
Durante mucho tiempo fue controvertido si la piel grasa empeora como resultado de una dieta desfavorable. Ahora sabemos que los alimentos que contienen mucha azúcar en realidad pueden promover la piel impura.
Aquellos que solo comen chocolate y comida rápida con moderación y prestan atención a una dieta equilibrada con muchas verduras y frutas también están haciendo bien a su piel.
También es bueno saberlo
En FarmaLink puedes encontrar productos protectores que se adaptan a las pieles impuras y obstruyen menos los poros. Sin embargo, es importante desmaquillarse a fondo y limpiarse la cara todas las noches.
Utiliza toallas diferentes para las manos y la cara y, sobre todo, cámbialas periódicamente.